John Atkinson Grimshaw
Grimshaw, nació en Leeds, hijo de un policía retirado.
Grimshaw estuvo influenciado
principalmente por los pintores prerrafaelitas, sobre todo por el pintor de
paisajes John William Inchbold, también de Leeds. Fiel a este estilo, creó
paisajes de colores precisos, luminosos, de vívido detalle y realismo, a veces,
usando fotografías para asegurar la precisión. Pintó paisajes que tipificaban
las estaciones o algún momento climático, escenas callejeras de la ciudad o los
suburbios y vistas, a la luz de la luna, de los muelles de Londres, Leeds,
Liverpool o Glasgow. Su cuidadosa pincelada y su habilidad para representar los
efectos lumínicos le permitía capturar con gran detalle los aspectos y el
ambiente de las escenas. Sus "cuadros de calles húmedas iluminadas con gas
y de muelles entre la niebla, transmiten una extraña calidez y una alienación
de la escena urbana".
Entre sus últimos trabajos,
incluyó escenas imaginadas de la Antigua Grecia y la Antigua Roma y pintó temas
literarios de Longfellow y Alfred Tennyson incluyendo Elaine y La Dama de
Shalott. (Incluso Grimshaw puso a sus hijos el nombre de personajes de los
poemas de Tennyson).
En la década de 1880,
Grimshaw mantuvo un estudio en Chelsea, no lejos del estudio de James Abbott
McNeill Whistler. Después de visitar a Grimshaw, Whistler declaró: "Me
consideraba el inventor de los paisajes nocturnos hasta que contemplé los
cuadros de claros de luna de Grimmy". A diferencia de las escenas
nocturnas impresionistas de Whistler, Grimshaw trabajaba su vena realista:
"nítidamente enfocadas, casi fotográficas". Sus cuadros fueron
innovadores aplicando la tradición de las imágenes rurales a la luz de la luna,
a la ciudad victoriana, pulsando "la lluvia y la bruma, los charcos de
agua y el esmog de la Inglaterra industrial victoriana con una gran poesía".
Fuentes:
Nota: La propiedad
intelectual de las imágenes que aparecen en este blog corresponde a sus autores
y a quienes éstos las hayan cedido. El único objetivo de este sitio es divulgar
el conocimiento de estos pintores, a los que admiro, y que otras personas
disfruten contemplando sus obras.